Sobre la intuición

La intuición es la habilidad para conocer, comprender o percibir algo de manera clara e inmediata, sin la intervención de la razón y, en palabras del sociólogo Malcolm Gladwell “la intuición es una capacidad rápida de cognición, propia del cerebro que permite formarnos juicios instantáneos”. Antes, la única forma de éxito posible para la toma de decisiones era la basada en el razonamiento, en la recopilación de datos lógicos y contrastados que nos asegurara el éxito. Pero en la última década, psicólogos y neurólogos están estudiando la intuición de forma científica, como un recuso excelente para la toma de decisiones acertada.

Así lo afirma Gerd Gigerenzer en la entrevista concedida a Eduard Punset para el programa Redes de TVE. Este neurocientífico alemán, director del Instituto Max Planck de Desarrollo Humano, en Berlín y experto en el estudio del riesgo y la toma de decisiones, afirma que nuestro cerebro inconsciente está continuamente haciendo inferencias que nos permiten tomar decisiones rápidas. Si no fuera así, tendríamos que pensarlo todo y no haríamos nada… Constata que el cerebro inconsciente decide por sí mismo y que las decisiones intuitivas son, muchas veces, más acertadas que las muy pensadas atendiendo a largas listas de pros y contras. Gigerenzer defiende la intuición y los atajos de nuestro cerebro como mecanismos eficaces a la hora de tomar decisiones sencillas o trascendentales.

"Gran parte de la intuición se adquiere mediante la interacción con el medio" (Robin M. Hogarth)

Pero ¿de dónde procede la intuición? Ese conocimiento que aflora de forma aparentemente mágica es la síntesis de un montón de información que hemos procesado de forma inconsciente en nuestro cerebro, procedente de la observación y la escucha verbal y no verbal, de los gestos y corporalidades de otros, comunicaciones anteriores que creíamos olvidadas, de conexiones entre acontecimientos, de las sensaciones percibidas, de situaciones similares…  

A lo largo de un proceso de coaching se producen muchos momentos en los que el coach sabe “cosas” y no hay ningún motivo racional para saberlas. Tampoco el coachee es consciente de esas “cosas”. La intuición es una herramienta que está presente en todas las fases de la Metodología CORAOPS^®, junto con la escucha 360º y las preguntas poderosas, y es, por tanto un aspecto fundamental a tener en cuenta, desde el primer momento.

Las tres están profundamente relacionadas: la escucha 360º (el lenguaje, la corporalidad, la emoción, los silencios… ) nos aporta la información consciente e inconsciente que  activa la intuición y ésta se coteja, valida, amplia o desecha  a través de las preguntas poderosas. Cuando nos dejamos llevar por la intución, sin cotejarla, podemos estar equivocadose intoxicar el proceso con juicios erróneos en nuestra la columna izquierda. Nos puede llevar a dirigir, a romper el contexto con un coachee que no se siente entendido y a sesgar de forma inconsciente la exploración de la realidad…Al dar por sentadas esas ideas propias, solo intuidas, estamos limitando el aprendizaje del coachee y la búsqueda de opciones verdaderamente efectivas y enfocadas.

"Las ideas se encienden unas con otras como las chispas eléctricas" (Johann J. Engel)

¿Cómo podemos traer la intuición de forma productiva al proceso de coaching?

Debemos cotejar esas “corazonadas” con el coachee. Nadie mejor que él para validarlas, si le sirven y le aclaran esos procesos internos qué, aparentemente, él no sabía resolver por sí mismo… De estas ideas, en principio intuidas, vendrán otras que enriquecerán el proceso, nos llevarán a la solución de problemas y mediante la comprensión de la realidad y la generación de nuevas opciones. Si, por el contrario las intuiciones no fueran acertadas, deberíamos renunciar a ellas, desapegándonos, antes de que se conviertan en prejuicios erróneos y limitantes para ambos.

Nada de columnas izquierdas con peso, ni mochilas con intuiciones inservibles que solo frenan los pasos o nos pierden por caminos equivocados. Sí a la manifestación y contraste de nuestras intuiciones, sensaciones, corazonadas, o como queramos llamarlas, para que el coachee decida si le resultan valiosas y le sirvan para caminar mejor y en la dirección correcta hacia su objetivo.

Artículo de Marisa López Huerta, Coach Certificada en CORAOPS